No.

No actúes tan extraño, duro como una roca. Si te mostré pedazos de piel que la luz del sol aún no toca. Y tantos lunares que ni yo misma conocía. Te mostré mi fuerza bruta, mi talón de Aquiles, mi poesía. No dejes que el barco parta antes de que zarpemos hacia alguna isla desierta y después, después veremos. Si me ves desarmada, ¿por qué lanzas tus misiles? Si ya conoces mis puntos cardinales, los más sensibles y sutiles. ¿Qué harás? la vida lo dirá.. ¿Que haré si no te vuelvo a ver? Si desde el día en que no estás , en el día en que no te veo , mi mundo ya se vuelve otra vez negro.. sin colores artificiales de esos que a ti te gustan tanto.